Hace dos semanas volví a Toledo para cubrir una boda de cuento. Ya de por si, esta ciudad medieval ubicada a la orilla del Tajo te ofrece siempre un escenario increible para cualquier reportaje.
Empecé con Gonzalo a eso de las 16:00, era la típica tarde calurosa de Toledo, el calor apretaba y el novio me esperaba en el hotel Abad rodeado de su familia, todos entusiasmados y con ganas de poder disfrutar de un día tan inolvidable, no podía fallar nada. Hicimos el domicilio sin sobresaltos, y decidimos salir a hacer las últimas fotos al exterior, aprovechando un poco esas longevas y oscuras calles de la ciudad imperial, sin entretenernos demasiado, ya que tener a Gonzalo con el traje puesto con la solanera que había en el exterior no era una gran idea… 3 fotitos y camino al hotel AC Ciudad de Toledo para encontrarme con Melanie.
Melanie también estaba esperandome rodeada de sus familiares más cercanos mientras la terminaban de maquillar en una preciosa habitación con unas vistas inmejorables a la ciudad toledana. Todo fue sobre ruedas, con los tiempos bien marcados y sobre todo viendo como Melanie disfrutaba de cada instante de ese día y de lo bien que se lo estaba pasando con las fotos, se la veía radiante y llena de felicidad.
CEREMONIA EN LA IGLESIA DE SANTIAGO ARRABAL
Tras terminar con los domicilios fuimos a la iglesia de Santiago Arrabal, justo al lado del hotel donde se había cambiado a Gonzalo, una iglesia del siglo XIII, una auténtica joya de la historia y con un interior que era una pasada. Allí esperaba Gonzalo la llegada de Melanie, que se hizo esperar un poco como es debido para «sufrimiento» del novio y del resto de los invitados. Cuando Melanie llegó se abrieron las gigantescas puertas iluminando la oscura iglesia para recibir a la novia en su camino al altar agarrada al brazo de su padre, la espectación en ese momento os la podéis imaginar.
Finalizada la ceremonia y tras las felicitaciones y el lanzamiento del arroz por parte de los invitados, pusimos rumbo a la finca, el Cigarral de Santa María, conocido también como Cigarral de los Viñedos, donde hicimos la sesión de fotos junto con la vespa que habían reservado para la ocasión.
FOTOS Y CELEBRACIÓN DE LA BODA EN EL CIGARRAL DE SANTA MARÍA
Con las fotos hechas, empezó el cóctel y la diversión para todos los invitados, una celebración llena de sorpresas y en un escenario de lujo, la finca era preciosa y con unas vistas envidiables!
Entre todas las sorpresas me gustaría destacar una por su carácter solidario, y es que Melanie y Gonzalo quisieron regalar a sus invitados unas divertidas narices de payaso que hacen en la Fundacion Thedora y cuya recaudación va destinada a los niños con cáncer, todo un detallazo, es la segunda boda en la que lo veo y me parece una idea fantástica, además los invitados se divierton muchísimo con el regalo como podéis ver en alguna de las fotos.
Y luego por fin llegó la fiesta, donde ya todo el mundo pudo desatarse y disfrutar de la noche en el exterior con una temperatura buenísima, la fiesta estaba en su mejor punto cuando di por terminado el reportaje… y es que si seguía un poco más me iba a tocar censurar alguna que otra foto =)
Bueno chicos! tal y como os prometí aquí está vuestro adelanto, espero que lo estéis pasando divinamente en vuestro viaje de luna de miel. Un millón de gracias por cuidarnos así de bien durante todo el día, da gusto encontrar semana tras semana personas tan maravillosas como vosotros que hacen que disfrute de mi trabajo como nadie! nos vemos a la vuelta, un abrazo!
