Una preboda más de esta temporada, y todas las que todavía quedan! En esta ocasión los pasos me llevaron de nuevo a ser fotógrafo en Toledo, esa ciudad imperecedera en el tiempo que me hace viajar siglos atrás cada vez que la visito. Merece la pena perderse entre sus calles, pasear a la orilla del Tajo que la custodia, degustar su magnífica gastronomía y como no, contemplar un atardecer desde lo alto de la Piedra del Rey Moro. Además tuvimos la suerte de encontrar un precioso lugar para esta preboda en campos de amapolas.
CAMPOS DE AMAPOLAS EN TOLEDO
Hoy os presento a Rocío y Alexis, a los que tuve el gusto de conocer justo el día que realizamos la sesión de preboda, ya que ellos residen en Alemania y fue imposible vernos antes, aun así no tardamos mucho en conectar y apenas tuvimos que hacer unas fotos de calentamiento.
Tenían claro que querían las fotos de preboda en Toledo, pero además a Rocío le hacía mucha ilusión hacer alguna foto también en el campo, aprovechando la primavera… y no pudimos tener más suerte, porque de camino a Toledo me encontré con un precioso y denso campo de amapolas a escasos 10 minutos de la ciudad, por lo que en esta ocasión cambiamos el atardecer en la Piedra del Rey Moro por el campo de amapolas para hacer la última parte de las fotos y sin duda el acierto fue total. No todos los días se puede hacer una preboda en campos de amapolas como este.
PREBODA ENTRE AMAPOLAS ROJAS
Empezamos por la zona del río, junto al puente de Alcántara, seguido subimos al propio puente e hicimos alguna foto en una de las puertas que más me gustan de Toledo, para luego subir hacia el valle donde tenemos sin duda las mejores vistas de Toledo, por último cogimos el coche hacia el campo de amapolas que había visto unas horas antes… parece que fue todo muy rápido, pero en todo este tiempo hicimos mogollon de fotos y pude ver como Rocío y Alexis se soltaban cada vez más, además cuando no estabamos haciendo fotos aprovechabamos para que me contasen un poco sobre su boda, ya que apenas habíamos podido hacerlo al no habernos visto antes.
Tras terminar la sesión de fotos, Rocío y Alexis se despidieron de sus familiares que les habían acompañado hasta Toledo y nos pusimos rumbo hacía el aeropuerto, donde en unas horas tenían que coger un vuelo de vuelta a Alemania… esto si que es aprovechar el tiempo!
Bueno chicos, fue un placer conoceros y poder tener esta primera toma de contacto con vosotros, muchísimas gracias por vuestra disposición en todo lo que os pedí, hasta cuando os tiré al suelo en medio del campo jeje, lo pasé fenomenal y estoy seguro que el día de la boda todo saldrá igual de bien. Nos vemos pronto, espero que os guste este adelanto. Abrazos!