LAS PLAYAS DE CANTABRIA: UNA INSPIRACIÓN PARA LA LIBERTAD
Parece que tenemos que ir despidiéndonos del verano, a punto de entrar en otoño parece que han llegado las primeras lluvias, esperemos que este año llueva un poco más en estas fechas que en el anterior para tener un otoño en condiciones… eso si, que no nos llueva en ninguna boda ni postboda de todas las que aún quedan! Hoy os traigo una preciosa postboda en Cantabria.
¿Conocéis San Vicente de la Barquera en Cantabria?? seguro que si, al menos de oídas. Pues la sesión de postboda que os dejo hoy la hicimos a caballo entre San Vicente y la playa de la Arnía junto a Coral y Roberto, que ya es la tercera vez que se pasan por el blog. Me encanta ser fotógrafo en Cantabria y poderos enseñar imágenes como estas.
Teníamos poco margen de maniobra para cuadrar la sesión, ya que querían hacerla en la playa y apenas había dos días disponibles antes de que tuviesen que volver al trabajo. Además la marea baja no nos cuadraba con el atardecer para poder aprovechar una de esas playas rocosas que tanto juego suelen dar, así que decidimos empezar al medio día con la marea baja en Arnía aunque la luz no fuese la más adecuada y terminar en una de las playas de arena de San Vicente con la luz del atardecer , teníamos la esperanza de que las nubes actuaran de difusor ante la potente luz del sol, pero no tuvimos la suerte. Eso si, el atardecer que nos regaló la puesta de sol fue precioso.
POSTBODA EN CANTABRIA: DESDE LA PLAYA DE LA ARNÍA HASTA SAN VICENTE DE LA BARQUERA
Pero empecemos desde el principio… o mejor omitimos esta primera parte porque no pudimos empezarla con peor mal píe, y nunca mejor dicho, pues nada más empezar a bajar hasta la playa, uno de los tres resbaló cayendo en plancha, no diré el nombre, eso queda entre nosotros y nuestros allegados a los que les hemos contado la anécdota =) Lo cierto es que fue una caída muy divertida, y después de ver que no había pasado nada no pudimos hacer otra cosa que echarnos a reír sin parar.
Tras habernos recompuesto de la caída y tras caminar o más bien casi escalar a través de las rocas, llegamos a la zona donde empezaríamos con las primeras fotos, la marea estaba baja pero se notaba que estaba subiendo poco a poco. Era una zona muy tranquila donde apenas había gente y pudimos estar a nuestra bola… como siempre con algún percance, sino son ortigas en el bosque, flores que dan alergia en el campo, son erizos de mar que no ves y que pisas sin querer, lo importante siempre en una postboda es irnos con heridas de guerra.
Una postboda en Cantabria tiene mucho trabajo, y como esto nos había sabido a poco, Coral y Rober quisieron jugarse más el tipo subiendo a unas rocas donde rompían las olas con bastante fuerza. Esta primera parte de la sesión fue súper divertida, nos reímos un montón y pasamos un rato estupendo… pero había que reponer fuerzas de cara a la segunda parte, así que nada mejor que un arroz con bogavante del Cantábrico!
UNA SESIÓN DE POSTBODA EN LA PLAYA QUE NUNCA OLVIDARÉ
Ya con el estomago lleno, cogimos el coche de nuevo y nos pusimos vuelta hasta San Vicente de la Barquera, que además era donde Coral y Rober tenían el dúplex donde haría noche antes de volver a casa. Antes de llegar a San Vicente paramos en una de sus playas, ya con el sol cayendo por el horizonte y dándonos un cielo y una luz espectacular, aun que aquí la luz ya se iba por cada segundo, apuramos tanto que cuando llegamos a las duchas para quitarnos la arena de los píes (caso a parte la arena que se llevo Coral con su vestido) ya era prácticamente de noche y tuvimos que ayudarnos con la luz de la linterna dando por finalizado un día muy intenso pero lleno de anécdotas y un montón de risas.
Aunque todavía quedaba la noche, que aprovechando que también vino Rafa, un amigo de la pareja el cual también estuvo en la boda, salimos a cenar por el pueblo poniendo la guinda al pastel con un gin tonic y un helado para Coral! Y ahora si, tocaba irse a dormir que por la mañana tenía que madrugar para volver a Madrid y preparar la boda del día siguiente.
Bueno Coral, Rober, una vez más os doy las gracias por haberme regalado la posibilidad de realizar una postboda en Cantabria e ir hasta allí a hacer estas fotos que espero que cuando las miréis las recordéis con cariño, de igual manera por vuestra hospitalidad y por lo bien que nos lo pasamos pese a las caídas, erizos, olas y demás! jeje Espero que os guste el adelanto…. mañana ya las tendréis todas, un abrazo!! =)