Tras unas semanas de ausencia en el blog debido al exceso de trabajo que tengo en estas fechas, vuelvo para empezar a traeros los adelantos pendientes que son unos cuantos, vamos a ver si consigo ponerme al día con el blog cuanto antes.
Hoy empezamos con una boda la cual llevaba tiempo esperando desde que Rocío y Dani me confirmaron que podría inmortalizar su día, y es que me podría reencontrar con Sandra y Rubén, una de las primeras parejas a las que hice su boda allá por el 2014 (que rápido pasa el tiempo) y que gracias a ellos y sus fotos pude ir abriéndome un mayor hueco en el mundo de la fotografía de bodas. Hoy ya en el 2018, se casaba Dani, el hermano de Sandra, con el amor de su vida, Rocío. Y para un acontecimiento así de importante no pudieron elegir un escenario más bonito para celebrar su unión junto a sus familiares y amigos, en un pequeño rincón del valle de Lozoya.
LA SIERRA DE GUADARRAMA, UN ESCENARIO DE LUJO PARA TU BODA
Los días previos amenazaban con lluvia, Rocío no dejó de mirar la previsión meteorológica hasta el día antes, pero estaba claro que todo tendría un final feliz. Cuando llegué a la casa rural donde se alojaba Dani, en Pinilla del Valle, el sol resplandecía brillante en el cielo y no había ni rastro de una posible lluvia. Allí me esperaba Dani junto a su familia, listo ya para comenzar a vestirse mientras Rubén me hacia la competencia con su cámara de fotos =)
Tras terminar con Dani, puse rumbo a Rascafría donde me esperaba Rocío en su habitación, acompañada también de su familia. Ya estaba maquillada, solo le faltaba darse los últimos retoques y ponerse su precioso vestido, por lo que podríamos ir rápido con las fotos para llegar prontito a la iglesia.
CEREMONIA EN LA IGLESIA DE ALAMEDA DEL VALLE
La ceremonia se celebraría en la iglesia de Alameda del Valle, otro de los preciosos pueblos del valle de Lozoya. Al final Rocío se hizo esperar un ratillo, pero que sería de una novia que está a punto de casarse sino se retrasa unos minutos para expectación del novio y de todos los invitados. Tras la llegada de Rocío dio comienzo el ritual que llegó a su momento cumbre con el intercambio de anillos que los uniría como marido y mujer. Y todavía quedaba la mejor parte de la boda…
Después de la lluvia de pétalos nos fuimos a hacer la sesión de fotos a uno de mis sitios favoritos de la zona, el bosque finlandés junto al monasterio de El Paular, lugar donde he realizado un montón de sesiones de postbodas y que sin duda es uno de los rincones más bonitos del valle de Lozoya. Allí estuvimos un buen rato pero sin dejar de mirar la hora para intentar estar el mayor tiempo posible en el cóctel.
EL CORRALÓN DEL EMBALSE, UNA ÍNTIMA FINCA JUUNTO AL PANTANO DE LA PINILLA
Tocaba vuelta a Pinilla del Valle, donde se festejaría el banquete y el cóctel, más concretamente en el Corralón del Embalse, una preciosa finca situada junto al embalse de la Pinilla. Allí esperaban todos los invitados ansiosos la llegada de los novios. El banquete estuvo lleno de sorpresas y además fue muy movidito, Rocío y Dani prepararon un juego en el que cada mesa tenía una canción y cuando esta sonara todos los invitados de la mesa tendrían que levantarse y bailar, algo que sin duda hizo pasárselo muy bien a los invitados, sobre todo a los más bailarines! Y por supuesto la mesa de los novios también tenía su propia canción. Luego un video que les preparó Rubén con un montón de fotos de toda su vida también sembró de emociones las mesas, y en especial a Rocío y Dani que disfrutaron un montón con todas las fotos.
Ya solo quedaba la última parte, y que mejor manera que empezar la fiesta con el baile nupcial de los novios para luego continuar con la barra libre y darlo todo en la pista de baile… hay fotos muy buenas de esta parte!!
Era hora de recoger el equipo y volver a casa, según abandonaba la finca… empezó a llover!! sin duda un gran día en todos los sentidos!
Chicos! siento la tardanza con el adelanto, como os dije estoy teniendo un mes muy movidito. Espero que la tardanza haya merecido la pena y os gusten estas primeras fotos porque hay un montón más esperando! Muchísimas gracias por todo de corazón, me alegro que aquella foto que os hice en la iglesia durante la boda de Sandra y Rubén nos hayan llevado hasta este punto. Nos vemos pronto, un abrazo!